La migración del campo a la ciudad que se produce en Chile a mediados del siglo xx, según Hugo Zemelman en su libro "El Migrante Rural" es motivo de dos razones: ocupacionales, de trabajo o la búsqueda de ascenso social, "en la primera puede tratarse de un caso de marginalidad económica, mientras que en la segunda refleja un grado de integración entre lo urbano y lo rural". Queda establecido entonces que las expectativas de mejores salarios, mayores posibilidades de empleo y mejores condiciones generales de trabajo son el punto de atracción.
Al parecer la maquinaria urbana absorbe toda forma de vida, el campesinado fue testigo. Al llegar a la ciudad, los que no encontraron un buen trabajo son empleados en cualquier cosa, sin no encuentran casa se van a la periferia, a las orillas de los ríos de torrente urbano y recién entonces se dan cuenta que estan metidos en otra clase de pobreza, que ahora hay que comprar, todo se compra , que el trueque ya no sirve, que ahora ya no son campesinos sino pobladores de "callampas", que son ignorantes, que saber trabajar la tierra acá no sirve.
Al parecer la maquinaria urbana absorbe toda forma de vida, el campesinado fue testigo. Al llegar a la ciudad, los que no encontraron un buen trabajo son empleados en cualquier cosa, sin no encuentran casa se van a la periferia, a las orillas de los ríos de torrente urbano y recién entonces se dan cuenta que estan metidos en otra clase de pobreza, que ahora hay que comprar, todo se compra , que el trueque ya no sirve, que ahora ya no son campesinos sino pobladores de "callampas", que son ignorantes, que saber trabajar la tierra acá no sirve.
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