viernes, 11 de mayo de 2007



El Hombre

El hombre recorría la marginalidad
con saco al hombro y arapos al viento
con el rumbo fijo de las luces
y el futuro incierto de las sombras y el frío

la sonajera estridente
de su intes(des)tino
lo hacía recorrer paso lento
los barrios de caridad burguesa.

Cartones y arapos acuestas
emprendía carrera contra el crepúsculo
para llegar a la meta solidaria
a entablar amistad con guarenes y perros en tiña.

Vida huraña de suciedad aparente
locura embellecedora
la risa irónica del asceta burlón
que ríe del avaro eterno.

jueves, 10 de mayo de 2007

El Remolino Urbano



La migración del campo a la ciudad que se produce en Chile a mediados del siglo xx, según Hugo Zemelman en su libro "El Migrante Rural" es motivo de dos razones: ocupacionales, de trabajo o la búsqueda de ascenso social, "en la primera puede tratarse de un caso de marginalidad económica, mientras que en la segunda refleja un grado de integración entre lo urbano y lo rural". Queda establecido entonces que las expectativas de mejores salarios, mayores posibilidades de empleo y mejores condiciones generales de trabajo son el punto de atracción.
Al parecer la maquinaria urbana absorbe toda forma de vida, el campesinado fue testigo. Al llegar a la ciudad, los que no encontraron un buen trabajo son empleados en cualquier cosa, sin no encuentran casa se van a la periferia, a las orillas de los ríos de torrente urbano y recién entonces se dan cuenta que estan metidos en otra clase de pobreza, que ahora hay que comprar, todo se compra , que el trueque ya no sirve, que ahora ya no son campesinos sino pobladores de "callampas", que son ignorantes, que saber trabajar la tierra acá no sirve.

La globalización imaginada

Después de dos décadas en que la globalización fue narrada como destino ineludible de la modernidad, comienza a estudiarse la variedad de intercambios, desencuentros y desigualdades que provoca. No la imaginan del mismo modo el gerente de una empresa transnacional, gobernantes de países centrales o periféricos, migrantes multiculturales o artistas que buscan ampliar su audiencia. Sólo una franja de políticos, financistas y académicos –sostiene García Canclini- piensan en una globalización circular. El resto imagina globalizaciones tangenciales: con los que hablan inglés, con naciones de la propia región, o en acuerdos de libre comercio para protegerse de la competencia generalizada. Junto a la homogeneidad generada por la circulación de capitales y bienes, emergen las diferencias culturales. No como simples resistencias a lo global. El autor explora, a partir de una vasta bibliografía que incluye la ya consagrada y la más reciente, cómo cambian los acercamientos y las discrepancias entre Europa, América Latina y los Estados Unidos. Con cifras y datos novedosos compara los distintos modos en que se globalizan las finanzas, la ciudadanía, las artes visuales, las editoriales, la música y el cine. Examina las ambigüedades que esconden las metáforas empleadas para hablar de conflictos fronterizos y analiza el humor en los malentendidos interculturales. Pero éste no es sólo un libro sobre la globalización; propone, además, cómo renovar los estudios culturales –en diálogo con la antropología, la sociología y la economía- para reconstruir un pensamiento crítico. Se pregunta qué hacer para que los intercambios globales no se gestionen sólo en lobbies de empresarios sino en una esfera pública donde se vaya construyendo una ciudadanía mundial.
Néstor García Canclini

miércoles, 9 de mayo de 2007

La resistencia


Creo que hay que resistir:esto a sido mi lema. Pero hoy, cuantas veses me he preguntado cómo encarnar esta palabra, cómo vivir la resistencia. Antes, la vida era menos dura, yo hubiera entendido por resistir un acto heróico, cómo negarse a seguir embarcado en este trén que nos impulsa a la locura y al infortunio. ¿Se le pude pedir a la gente del vértigo que se revele?¿se les puede pedir a los hombre y mujeres de mi país que se nieguen a pertenecer a este capitalismo salvaje si tienen que mantener a sus hijos, a sus padres?Si son responsables, ¿cómo habrían de abandonar esa vida?Las dificultades de la vida moderna, el desempleo, la super población, y el ajetreo de las ciudade han llevado al hombre a dar la primacia a lo económico, constituido como única preocupación. Así como en la guerra la vida del hombre es ser soldado o estar herido en algún hospital, en nuestros paises la vida es ser trabajador de tiempo completo, o quedar excluido. La hitoria es el mas grande conjunto de aberraciones, guerras, persecuciones, torturas e injustusias, pero a la vez tierra donde millones de hombres y mujeres se sacrifican para cuidar la vida de los demas. Ellos encarnan la resistencia.El mundo nada puede contra un hombre cantando en la miseria.
(fragmento) Ernesto Sabato


http://ca.geocities.com/el_rincon_de_nora/Biografias/biografia_ernesto_sabato.htm

http://es.wikipedia.org/wiki/Ernesto_Sabato

viernes, 4 de mayo de 2007

Acultaración ahora

Según el dicccionario de la real academia de la lengua española aculturación se define como: "proseso de recepción y asimilación de elementos culturales de un grupo humano por parte de otro".De acuerdo con esta definición se puede establecer que el hombre desde siempre a estado en proseso de aculturación, mutando sus costumbres, creencias, valores, por lo tanto tambien su accionar, un ejemplo decidor es la conquista del continente americano.Este acontecer interviene en nuestras vidas hasta el dia de hoy, mas de alguna véz nos hemos preguntado que susederia ahora si los españoles no hubiesen llegado a América. ¿respetariamos mas el lugar donde vivimos? ¿estariamos en un mundo menos vertiginoso?, ¿seria latinoamerica parte del llamado tercer mundo?

jueves, 3 de mayo de 2007

La Pulga Juan en estado periférico




La Pulga Juan se a vivir desde la MargipoblaciónXperiférica a la OtrapoblaciónZmásperiférica, ¡le dieron casa! estaba muy contenta y saltaba en una pata.El gobierno constuyo 2000 viviendas, ¡una para la Pulga Juan.!
Me pidió entonces que la ayudara a trasladarse, yo por supuesto accedí, es buena tela la Pulga Juan. Rápidamente pusimos todas sus pertenencias en el transporte.
En el camino ya, nos pusimos a chachariar, eran buenas las conversas con la Pulga Juan, me contaba de su abuelo, que era campesino y que en 1958 se habia trasladado a la ciudad buscando un mejor pasar, -mas, cuando llegó- me decía la Pulga Juan, - no encontró donde estar. -Dijéronle entonces de un lugar, el cual se podia "tomar", de un salto estuvo allá y un hogar construyó, pero la autoridad la sacó. En la silenciosa noche, con vela y chonchón, nuevamente su hogar paró. ¡conmigo no podran!, ¡conmigo no podran!, ese era mi abuelo deciame la Pulga Juan.